Hugo Chávez ¿Eres tú?
Hugo Chávez ¿Eres tú? por Jennifer Barreto-Leyva-
Vengo del futuro para contarles lo que viene.
La reciente encuesta política hecha en la isla, encuesta que muchos califican de fatula, ha revelado muchas más cosas de las que pueden verse.
Hace meses predije que Pedro Pierluisi apostaría a la reelección, sin embargo, pocos hicieron caso y entendieron entonces mis palabras.
“Continuaré dirigiendo a Puerto Rico por 5 años, 10 meses y 13 días más” dijera Pierluisi en la entrevista concedida al medio El nuevo día.
Al escuchar esas palabras, la piel se me puso de gallina, porque de forma instantánea vino a mi mente el dictador Hugo Chávez, en sus interminables y fétidos discursos, cuando empezó a amenazar con perpetuarse en el poder, de las muchas veces que lo hizo.
Hizo elecciones y procuró la asamblea constituyente para cambiar las leyes a su favor, y como niño malcriado fue extendiendo su mandato. Los tiranos y dictadores siempre usan los instrumentos democráticos para perpetuarse en el poder.
Primero dijo que se iba en el 2013, luego avanzado el tiempo dijo que se iría en el 2021 cuando iba a estar según el “perfeccionada la revolución” palabras textuales suyas. Hizo su entrada el cáncer y truncó esos planes, sin embargo, su legado de horror quedó para la eternidad, legado que tiene secuestrado mi país de nacimiento y conciudadanos, incluida yo, que aún con el agua al cuello, desesperada entre lágrimas hago todo lo que está en mis manos para salvar a mi amado Puerto Rico, tierra donde me crié y es mi familia materna, para que no caiga en este hoyo oscuro, al que se dirigen sin frenos y hasta felices.
A Hugo Chávez lo pusieron en el poder 4 cosas o situaciones claves:
- La prensa. Los medios de comunicación, en un 90% al menos, estaban a los pies del dictador. Le reían las gracias, hacían homenajes a su esposa a razón de nada, hacían reportajes de su “admirable vida” y pare usted de contar. Medios de comunicación que hoy no existen porque él los mandó a cerrar.
- La clase rica del país. Donaron para su campaña cantidades exorbitantes de dinero. Hoy lloran desde el exilio su estupidez. - La dejadez ciudadana. Hugo Chávez ganó en su momento, gracias a la abstención histórica que tuvo a lugar en la elección de diciembre del 1998 y el desinterés ciudadano en la política nacional. Venezuela venía de 40 años de corrupción dura y creyendo en una nueva propuesta y el voto castigo, se echaron la soga al cuello.
- Soberbia nacionalista. Los cubanos nos advirtieron por años lo que pasaría. No quisimos escuchar. La soberbia pudo más, y un nacionalismo nada sano, nos hizo ciegos y sordos a las advertencias.
Esta encuesta que ha dado tanto que hablar, no solo ha sacado a relucir la enorme desconfianza del ciudadano en sus políticos, sino la profunda crisis institucional en la política puertorriqueña, que en la actualidad es un triste circo, con hienas ávidas de dinero y poder.
Solo quieren títulos y posiciones, porque aquello de procurar bienestar y orden para la ciudadanía, ni siquiera lo mencionan ya en sus discursos. Perdieron toda forma ya.
Pero además, sacó a relucir el carácter dictatorial y tiránico del “gober” a la par de su carácter de cristal, que muchos hemos advertido por meses. Nos han llamado disparateros, sin embargo, el “disparate” es real, tiene nombre y apellido: Pedro Pierluisi.
¿Y cuál es el interés de perpetuarse en el poder? Sencillo, completar los objetivos de la agenda 2030 y sumergir a Puerto Rico en el progresismo.
En este momento nadie está tan comprometido con la agenda 2030 como Pierluisi. Y si no se ha dado cuenta aún, lo invito a revisar su flamante gestión, compare como era Puerto Rico antes y después de su llegada. Pero si esto no le es suficiente, le comparto sus palabras, dichas al final de la entrevista concedida al medio Nuevo Día hace algunos días “Aquí hay muchas agendas, la mía es Puerto Rico”... “nuestro objetivo es retener gobernación, retener comisaría y de igual manera retomar control de cámara y senado”... “En mi caso tengo dos sombreros, el de gobernador y el del presidente del PNP...por la estadidad, por el progreso, por la justicia social que nos une a los progresistas”. ¿La ciudadanía puertorriqueña? Ni mencionada por accidente.
La ofuscación y desesperación por hacer creer poder y liderazgo solo muestra su debilidad política. Porque lo que no es cierto, no te debe afectar, simple.
“El poder es como ser una señora, si tienes que decir que lo eres, significa que no lo eres”
Margaret Thatcher ¡Hasta la próxima!
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